El concepto de liderazgo ha cambiado en los últimos años en el entorno empresarial. Los líderes tradicionales y los formatos jerarquizados y autoritarios han evolucionado para dejar paso a un líder que practica lo que predica, fortaleciendo la cultura corporativa y contribuyendo en la fidelización del talento.
Según un estudio de la universidad de Buffalo, este tipo de liderazgo impacta directamente en la toma de decisiones, lo que también repercute positivamente a nivel económico para la empresa. El estudio indica que aquellas personas que estaban más orientadas hacia los demás, tomaban decisiones más inteligentes y mejor pensadas, analizando los problemas desde perspectivas más allá de la propia. En este sentido, un estudio elaborado por LLYC, destaca que el 75% de los CEOs asegura que la atracción y fidelización del talento es la cuestión que más les preocupa.
De este modo, ERNI Consulting España ha puesto en marcha un modelo de desarrollo de las habilidades interpersonales a través del “Liderazgo centrado en las personas” (People-centric Leadership), aquel que pone el foco en las necesidades de los equipos y personas, y se trabaja para satisfacerlas a través de herramientas como el empoderamiento y la delegación.
No obstante, “el liderazgo centrado en las personas no conduce únicamente a éxitos económicos tangibles o una mayor productividad de los empleados, sino que también genera un mayor bienestar y sensación de satisfacción, lo que fortalece el sentimiento de pertenencia y, por consiguiente, contribuye a la fidelización del talento”, explica Albert Alsina, director general de ERNI España.
“La importancia del liderazgo centrado en las personas reside en la necesidad de crear líderes que actúen como modelos a seguir. El comportamiento de este tipo de líderes, así como sus habilidades de comunicación, motivación y la capacitación de sus equipos para superar retos son claves para promover un entorno de trabajo sano y con un fuerte sentimiento de pertenencia”, concluye.