Llevar a cabo estrategias innovadoras dentro de las compañías, se ha convertido en una misión obligatoria para los responsables de recursos humanos a la hora de fidelizar el talento. En un mercado cada vez más competitivo y dinámico, el salario económico no es suficiente. Aquí, el salario emocional emerge como un diferenciador clave en la retención de talento.
El salario emocional comprende beneficios no económicos destinados a mejorar la calidad de vida y satisfacción laboral de los empleados. De este modo, incluye medidas como flexibilidad laboral, oportunidades de formación continua, y un fuerte énfasis en el bienestar físico y emocional. Según la Guía ‘El salario emocional: Cómo reforzar tu propuesta retributiva’, elaborada por Pluxee, la desmotivación entre los empleados ha aumentado un 42% respecto a 2023. Además, un 64% de los trabajadores están insatisfechos con su salario y más de la mitad (54%) con las opciones de conciliación laboral ofrecidas por sus empresas.
Por su parte, desde Qaizzen, startup centrada en ofrecer servicios que pueden considerarse salario emocional, destacan la importancia de cuidar el bienestar emocional de los empleados, a la vez que se establece un nuevo estándar para el desarrollo de un entorno laboral moderno y empático. Creemos que el bienestar emocional y la salud mental es fundamental para el desempeño laboral. Nuestro objetivo es asegurar que todos los empleados tengan acceso a recursos que les permitan manejar mejor el estrés y otros desafíos mentales, lo cual es un componente clave del salario emocional», señala Jesús Montilla, CEO de Qaizzen.
De este modo, el salario económico deja de ser el único factor a tener en cuenta por los empleados a la hora de valorar su nivel de satisfacción en la empresa. En la actualidad, se valoran otros aspectos y se tienen en cuenta a la hora de tomar decisiones sobre la permanencia o salida de una determinada organización retribuciones extrasalariales como el salario emocional. Nerea Ruiz, psicóloga especializada en bienestar laboral en Qaizzen, señala que «el salario emocional es en la mayoría de casos tan o más importante que el salario económico. Iniciativas como las que implementa Qaizzen no sólo mejoran la salud mental de los empleados, sino que también fomentan un ambiente laboral más positivo. Esto, a su vez, mejora el rendimiento y la productividad de los equipos».