El 48% de los empleados de las PyMEs nacionales considera que el género masculino representa más de la mitad de la plantilla, según un informe elaborado por Coverflex. Esta percepción es más común entre los hombres (59%) que entre las mujeres (38%).
Los resultados del estudio muestran que, si bien se han logrado avances en materia de diversidad e inclusión, aún persisten diferencias en la percepción y aplicación de medidas en las pymes españolas. La representación femenina en puestos de liderazgo y la implantación efectiva de planes de igualdad siguen siendo áreas con margen de mejora.
En micropymes (hasta 10 empleados), el 43% de los encuestados percibe mayoría masculina, una cifra que asciende al 63% en el caso de los hombres y desciende al 32% entre mujeres. En empresas pequeñas (11–50 empleados), el 55% de los hombres y el 47% de las mujeres considera que hay más hombres que mujeres. En medianas (hasta 250 empleados), el 49% observa mayoría masculina, y un 30% indica paridad de género.
En cuanto a los equipos directivos, el 56% del total de empleados afirma que los hombres ocupan más del 50% de los puestos de responsabilidad. El 21% percibe paridad (50/50) y el 17% cree que hay menor presencia masculina. Esta percepción también varía según el género del encuestado: un 64% de los hombres cree que su equipo directivo es mayoritariamente masculino, frente al 49% de las mujeres.
Por otro lado, el 60% de los empleados no percibe brecha salarial entre hombres y mujeres en sus organizaciones. Sin embargo, el 30% de las mujeres sí identifica esa desigualdad, frente al 23% de los hombres. Esta percepción es más acusada en las empresas de menor tamaño (micropymes), donde el 37% de las mujeres lo señala, frente al 21% de los hombres.
Planes de igualdad: cumplimiento desigual
Desde marzo de 2022, las empresas con más de 50 empleados deben contar con un plan de igualdad, conforme a la legislación vigente. Sin embargo, el 44% de los trabajadores de pymes indica que su empresa no cuenta con una estrategia definida en esta materia.
Solo el 19% de los encuestados afirma que su organización dispone de un plan con un responsable asignado. Otro 20% señala que existe un plan, pero sin equipo o persona a cargo de su desarrollo. Las medianas empresas presentan un mayor grado de implementación que las pequeñas o microempresas.
El estudio también explora si la compensación económica se ve afectada por factores como género, orientación sexual, raza o discapacidad. Un 72% de los encuestados considera que no hay influencia de estos factores, mientras que un 19% sí lo percibe. Esta percepción de desigualdad es mayor entre mujeres (21%) y jóvenes de entre 18 y 34 años (28%).
Según Coverflex, fomentar una cultura corporativa inclusiva y equitativa resulta clave para construir entornos laborales más justos y sostenibles a largo plazo. “Es momento de construir lugares de trabajo donde se nos valore por lo que aportamos, no por nuestra edad o género. No es solo lo justo: es la decisión más inteligente para fomentar equipos diversos que impulsen la innovación”, afirma Julia Abarca, Country Manager de Coverflex.