El Estudio de RRHH 2025 de Personio revela que los costes crecientes, la digitalización y la falta de competencias son hoy los principales retos de la gestión de personas en España. Los departamentos de RRHH buscan equilibrar productividad y bienestar, mientras priorizan la atracción de talento joven y la adaptación a la inteligencia artificial.
Los departamentos de Recursos Humanos en España atraviesan un escenario complejo, marcado por la presión de costes y la transformación del mercado laboral. Según los datos de Personio, las principales barreras para los líderes de RRHH son el encarecimiento de materiales y servicios (40%), el elevado coste de contratación y retención de talento (35%) y la fuerte competencia por perfiles cualificados (32%). A ello se suman riesgos macroeconómicos (31%), el impacto de la inteligencia artificial y la automatización (31%) y la escasez de competencias (27%).
La hoja de ruta para el próximo año refleja prioridades claras: atraer talento joven (38%), preparar a las plantillas para trabajar con IA (38%), mejorar la productividad (37%) y elevar el compromiso (36%). También ganan terreno la retención de perfiles estratégicos (30%), el bienestar de los empleados (33%) y el desarrollo de nuevos líderes (24%).
Aunque la previsión de despidos disminuye a nivel global (del 60% en 2024 al 39% en 2025), los desajustes entre planificación y necesidades siguen generando costes elevados. Solo en España, las pymes asumieron de media 274.500 euros el último año por errores de contratación, formación ineficaz o rotación evitable.
Un tercio de los españoles planea cambiar de trabajo
El otro gran dato del informe es el alto nivel de movilidad laboral: un 36% de los españoles planea cambiar de empleo en los próximos 12 meses, y un 3% ya ha iniciado el proceso. Entre las razones principales figuran los salarios (36%), los beneficios limitados (32%), la falta de oportunidades de carrera o reconocimiento (28%), el estrés laboral (25%) y el desequilibrio entre vida personal y trabajo (22%).
Las diferencias de género también son relevantes: las mujeres priorizan más el salto hacia mejores sueldos (38,8% vs 33,6% de los hombres), mientras que ellos destacan las carencias en beneficios (35% frente al 28,8%) y en liderazgo (21,5% vs 13,1%).
Para Lenke Taylor, Chief People Officer de Personio, este panorama obliga a replantear la gestión de personas: “Los líderes de RRHH tienen una oportunidad crítica para alinear las habilidades de las personas con las necesidades del negocio y crear lugares de trabajo atractivos, productivos y gratificantes. Eso implica invertir en desarrollo, confiar en la flexibilidad y contratar por potencial, no solo por credenciales”.
Transparencia salarial y reducción de jornada: desafíos locales
En el ámbito nacional, dos tendencias generan especial inquietud. La transparencia salarial preocupa a un 25% de los responsables de RRHH por las posibles tensiones internas, mientras que un 17% apunta a la carga administrativa asociada al cumplimiento normativo.
La reducción de la jornada laboral divide opiniones: un 40% prevé un aumento de la carga administrativa, un 24% la interpreta como ventaja competitiva y un 20% advierte de retos operativos vinculados a la productividad y la gestión de costes.
Los profesionales también reclaman cambios en los modelos de trabajo. El 54% considera obsoleto el horario tradicional de 9 a 17 horas y un 35% dejaría su empleo si se le exigiera acudir a la oficina más de tres días a la semana. Entre los jóvenes de 16 a 24 años, un 36% asegura ser más productivo trabajando desde casa.
Competencias
El estudio confirma un cambio de paradigma en los procesos de selección: el 67% de los responsables de RRHH prioriza competencias y potencial sobre credenciales académicas. La percepción de los empleados coincide: un 54% considera que los títulos universitarios están perdiendo peso frente a las habilidades transferibles.
La IA acelera esta transformación. El 50% de los trabajadores españoles pide más formación en esta tecnología y en herramientas digitales, aunque solo un 37% asegura recibir apoyo de su empresa. Entre los jóvenes de 25 a 34 años, un 55% está adquiriendo competencias por su cuenta para mantenerse empleable.