En el ámbito laboral, pese a los avances logrados en prevención, los accidentes de trabajo continúan siendo una problemática vigente en numerosos sectores, especialmente aquellos que implican un alto esfuerzo físico o condiciones potencialmente peligrosas. Según los datos más recientes del Ministerio de Trabajo y Economía Social, en 2024 se registraron en España 796 fallecimientos por accidente laboral, lo que supone un incremento del 10,4 % con respecto al año anterior.
La mayoría de las víctimas fueron hombres y, en cuanto a los sectores más afectados, destacan el transporte y almacenamiento (152 muertes), la construcción (157) y la industria manufacturera (115), áreas en las que participan tanto hombres como mujeres.
Ante esta realidad, Eurofirms Group enfatiza la importancia de consolidar entornos laborales que no solo sean seguros, sino que también promuevan el bienestar integral de los trabajadores. Actualmente, fomentar una cultura preventiva equivale a impulsar una cultura del bienestar, que vele por la salud física, mental y emocional del equipo humano. En esta línea, Eurofirms Preven —la división especializada en prevención de riesgos laborales y salud ocupacional del grupo— subraya la necesidad de integrar de manera efectiva el bienestar de las personas en el núcleo de la cultura corporativa.
‘’Considerando los datos actuales en España en cuanto a seguridad y salud en el trabajo, resulta fundamental que las organizaciones puedan entender la prevención de riesgos laborales como una inversión en los profesionales que la forman y no como un trámite’’, afirma Raimon Roger, Leader de Eurofirms Preven. ‘‘La seguridad y el bienestar de las personas deben ser el centro de toda estrategia empresarial, por ello, queremos acompañar a las empresas en su trasformación hacia entornos más humanos’’.
Incluir la salud mental en la PRL
Según datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, en 2024 se cursaron más de 600.000 bajas temporales relacionadas con los trastornos mentales y de comportamiento. De este modo, desde la startup española Neuromify han puesto en primer plano la necesidad de considerar la salud mental como parte integral de las políticas empresariales de PRL.
Para José Buil, CEO de Neuromify, “cuando se aborda la cuestión de los riesgos laborales, suele primar la atención a los peligros físicos. Sin embargo, las empresas tienen la responsabilidad, legal y moral, de velar por el bienestar emocional de sus empleados. La prevención es la única solución para mitigar el impacto que el estrés y la ansiedad tienen en la salud y la productividad de los trabajadores, sea cual sea su sector de actividad. Si no se actúa pronto, aparece el conocido como “burnout”, que es muy complicado de revertir y, además de sus consecuencias sobre los trabajadores afectados, supone un coste muy alto para las organizaciones, tanto en pérdidas económicas como en evasión del talento”.