Según un informe de Adecco Group Institute, se reduce por séptimo trimestre consecutivo el número de personas que teletrabajan en nuestro país. Ahora mismo son 2,56 millones de personas, un 6,5% menos que hace un año.
Adecco Group Institute, el centro de estudios y divulgación del Grupo Adecco, ha presentado una nueva entrega del Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo que, semestralmente, profundiza en el grado de satisfacción de los trabajadores y trabajadoras españoles, así como en las oportunidades laborales del mercado de trabajo.
Según dicho informe, ya son siete trimestres consecutivos en los que el número de teletrabajadores en España se reduce en la comparación interanual. En el cuarto trimestre de 2022 se contaron 2,56 millones de personas que trabajaron al menos ocasionalmente desde su hogar, cifra un 6,5% inferior que la de un año antes. La proporción de teletrabajadores en el total de ocupados, tomando como referencia la media móvil de cuatro trimestres, ha descendido 1,7 puntos porcentuales en la comparación interanual, hasta el 12,7%. Es el dato más bajo desde junio de 2020.
Antes de la pandemia, el número de teletrabajadores era de 1,64 millones. Esa cifra se más que duplicó, alcanzando un máximo de 3,55 millones en el segundo trimestre de 2020 (el del confinamiento domiciliario). El hecho de que ahora haya 2,56 millones de personas que trabajan al menos ocasionalmente desde su hogar significa que aproximadamente la mitad de los teletrabajadores surgidos por la pandemia volvieron a trabajar exclusivamente de modo presencial.
Lo mismo se puede ver a través de la proporción de teletrabajadores en el total de ocupados: el 12,7% actual está a mitad de camino entre el 8,3% del final de 2019 y el máximo del 16,2% del primer trimestre de 2021.
A día de hoy, el teletrabajo es fundamentalmente un fenómeno madrileño y, en menor medida, catalán. A pesar de que la Comunidad de Madrid alberga al 15,6% del total de ocupados, tiene al 23,8% de todos los teletrabajadores del país. Cataluña, con el 17,2% de los ocupados de España, tiene el 19,3% de todos sus teletrabajadores. Así, entre ambas autonomías, poseen el 32,8% de todos los ocupados, pero alcanzan al 43,1% del colectivo de teletrabajadores españoles.
Nueve comunidades autónomas muestran una reducción interanual del número de teletrabajadores. Extremadura (-29,2% interanual), Baleares (-25,7%) y la Comunidad de Madrid (-14,6%) muestran los recortes más pronunciados. El descenso de Madrid, donde también se acumulan siete trimestres consecutivos de caídas, sugiere que el retroceso del teletrabajo podría no haber concluido.
Sin embargo, también hay ejemplos de incrementos significativos en la cantidad de personas trabajando al menos ocasionalmente desde su hogar. Son los casos de Cantabria (+32,1%), Navarra (+11,8%) y, en menor medida, del País Vasco (+8,4%) y la Región de Murcia (+6,9%).
En todo caso, cuando observamos la evolución de la media móvil de cuatro trimestres, ni siquiera esos incrementos logran evitar que 14 autonomías presenten una reducción interanual en su proporción de teletrabajadores.
Madrid permanece como la comunidad con mayor desarrollo del teletrabajo. Un 20,4% de sus ocupados dice trabajar al menos de manera ocasional desde su hogar, proporción que resulta 3,9 puntos porcentuales más baja que la de hace un año y el mayor recorte a nivel autonómico. Le sigue Cataluña, con un 14,1% de teletrabajadores (-2,9 p.p.). Ambas son las únicas regiones que superan la media nacional.
Si miramos a la Unión Europea, entre los 20 mayores países miembros, España ocupaba el puesto 14 en cuanto a la penetración del teletrabajo en 2019, mientras que ahora ocupa el puesto 16.