Softonic.com, empresa especializada en distribución de software, ha publicado los resultados de un informe interno que revela que la empresa ha conseguido reducir la brecha salarial prácticamente a cero. De hecho, las trabajadoras de Softonic tienen una ventaja del 1% en su remuneración anual total en comparación con sus compañeros.
Este logro contrasta con la brecha salarial que existe en toda Europa, la cual se situó en un 19% en el último informe de Figures y 50inTech. Esto implica que, en promedio, las mujeres ganan 8.100 euros por cada 10.000 euros que ganan los hombres.
Softonic ha logrado avances importantes en el aumento de la representación de mujeres en su plantilla. Actualmente, el 37% de sus empleados son mujeres. Esta cifra supera ampliamente el promedio de la industria tecnológica europea que, según el último informe de McKinsey, es de un 22%.
El informe también destaca que el 42% de los puestos de alta dirección en la empresa lo ocupan mujeres, lo que subraya el compromiso de la empresa con la promoción de un equipo directivo diverso. Además, en el transcurso de 2022, Softonic incorporó a 38 nuevos miembros a su plantilla, 39% de los cuales fueron mujeres. Estas contrataciones se dieron, sobre todo, en roles especializados y de consultoría, lo que ha llevado a una mayor presencia de mujeres en los equipos de producto e ingeniería de la compañía.
Según Débora Muñoz, directora de RRHH de Softonic y encargada del estudio, “estamos comprometidos con la promoción de la diversidad, la igualdad y la inclusión, y continuaremos trabajando para asegurar un entorno de trabajo inclusivo y equitativo para todos nuestros empleados. Nos esforzamos por crear un lugar donde cada persona se sienta valorada, escuchada y tenga las mismas oportunidades para dar lo mejor de sí misma. Estamos orgullosos de los avances que hemos logrado y estamos decididos a mantener estos altos estándares mediante la continuación de estas iniciativas».
La empresa asegura que seguirá trabajando su compromiso con la igualdad y la diversidad. Algunos de los próximos pasos incluyen la promoción del uso de un lenguaje inclusivo en la organización y la provisión de formación específica tanto para los reclutadores como para los empleados en materia de igualdad de género.